Los enfrentamiento dejaron cuatro muertos
Se multiplica los terrenos ocupados.
La provincia de Jujuy sigue convulsionada por el conflicto generado a raíz de la toma de terrenos por parte de personas sin viviendas, mientras que las ocupaciones se extienden. Dirigentes sociales aseguran que se duplicó el número de familias en esta situación y afirman que las medidas que el Gobierno local tomó hasta el momento no son suficientes.
La mecha que hizo estallar la bomba de tiempo que generó el déficit habitacional en la provincia fue un violento desalojo, ocurrido la semana pasada en terrenos de la empresa Ledesma, que terminó con la muerte de cuatro personas y decenas de heridos.
Tras esa jornada violenta, el número de ocupas se multiplicó. Según Enrique Mosquera, delegado de la Corriente Clasista y Combativa en Jujuy, ya son 2.000 las familias que mantienen tomados terrenos en varias zonas.
"Hoy calculamos que hay 60 o 70 hectáreas tomadas de tierras. Calculamos más de 2 mil familias", explicó en declaraciones a radio El Mundo el dirigente de la CCC. "La toma de tierras se extendió, por lo menos lo que dicen los medios por acá, es que hay como 15 localidades que se están tomando tierras. Una de las localidades más importantes es en Puesto Viejo, son tierras de la empresa Minetti, que han tomado campesinos tierras para poder producir".
Mosquera advirtió que la primera iniciativa del Gobierno provincial para paliar la crisis, la expropiación de 40 hectáreas pertenecientes a Ledesma, "no resuelve nada".Además, dijo que la aprobación "llegó tarde, después de que estalló la violenta social".
El dirigente sostuvo: "Es una situación difícil de controlar, no la pueden controlar con una medida que es insuficiente por un lado y por otro lado yo creo que está mal llamada ley de expropiación, porque en realidad van a cambiar esas tierras por algún tipo de beneficio económico para la empresa, expropiar tierras no es una expropiación lisa y llana".
Por otro lado, el delegado de la CCC cargó contra el gobernador Walter Barrionuevo y, si bien aseguró que no tenían un objetivo político cuando inició el conflicto, opinó que el mandatario provincial "no tiene una política clara para resolverlo". "Nosotros no sabemos cómo se maneja este gobierno, se maneja de una manera siempre de prepotencia, extorsiva y que no busca resolver".
Mosquera anticipó que en las próximas horas se reunirán con autoridades provinciales para intentar destrabar el conflicto, y esperan hablar con el intendente de General Libertador San Martín, lugar donde se originaron los enfrentamientos.
Se multiplica los terrenos ocupados.
La provincia de Jujuy sigue convulsionada por el conflicto generado a raíz de la toma de terrenos por parte de personas sin viviendas, mientras que las ocupaciones se extienden. Dirigentes sociales aseguran que se duplicó el número de familias en esta situación y afirman que las medidas que el Gobierno local tomó hasta el momento no son suficientes.
La mecha que hizo estallar la bomba de tiempo que generó el déficit habitacional en la provincia fue un violento desalojo, ocurrido la semana pasada en terrenos de la empresa Ledesma, que terminó con la muerte de cuatro personas y decenas de heridos.
Tras esa jornada violenta, el número de ocupas se multiplicó. Según Enrique Mosquera, delegado de la Corriente Clasista y Combativa en Jujuy, ya son 2.000 las familias que mantienen tomados terrenos en varias zonas.
"Hoy calculamos que hay 60 o 70 hectáreas tomadas de tierras. Calculamos más de 2 mil familias", explicó en declaraciones a radio El Mundo el dirigente de la CCC. "La toma de tierras se extendió, por lo menos lo que dicen los medios por acá, es que hay como 15 localidades que se están tomando tierras. Una de las localidades más importantes es en Puesto Viejo, son tierras de la empresa Minetti, que han tomado campesinos tierras para poder producir".
Mosquera advirtió que la primera iniciativa del Gobierno provincial para paliar la crisis, la expropiación de 40 hectáreas pertenecientes a Ledesma, "no resuelve nada".Además, dijo que la aprobación "llegó tarde, después de que estalló la violenta social".
El dirigente sostuvo: "Es una situación difícil de controlar, no la pueden controlar con una medida que es insuficiente por un lado y por otro lado yo creo que está mal llamada ley de expropiación, porque en realidad van a cambiar esas tierras por algún tipo de beneficio económico para la empresa, expropiar tierras no es una expropiación lisa y llana".
Por otro lado, el delegado de la CCC cargó contra el gobernador Walter Barrionuevo y, si bien aseguró que no tenían un objetivo político cuando inició el conflicto, opinó que el mandatario provincial "no tiene una política clara para resolverlo". "Nosotros no sabemos cómo se maneja este gobierno, se maneja de una manera siempre de prepotencia, extorsiva y que no busca resolver".
Mosquera anticipó que en las próximas horas se reunirán con autoridades provinciales para intentar destrabar el conflicto, y esperan hablar con el intendente de General Libertador San Martín, lugar donde se originaron los enfrentamientos.
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