Tras el anuncio por los ministros de Economía y de Planificación Federal, Amado Boudou y Julio de Vido, respectivamente, la dirigencia sindical y empresarial mostró su apoyo a la medida.
El titular de Edenor, Alejandro McFarlane, aseguró que la quita de ayuda es “una medida correcta” y agregó que se hizo sobre compañías “que tienen rentabilidad y les ha ido bien en sus negocios, no así con las familias. No tiene sentido que se financie a aquellos que podamos pagar la energía lo que vale”.
“La lógica que tienen los subsidios en el mundo está vinculada a ayudar a los que no pueden pagar por algún motivo; es el camino apropiado ir quitando lentamente los subsidios por el bien que consumen, en este caso la luz y el gas”, añadió.
McFarlane se declaró a favor de una comisión que controle y regule la quita de ayuda a las empresas y sectores. “Esto se debe hacer gradualmente, que se vaya recomponiendo lentamente la gran bola de subsidios y que el que pueda pagar vaya pagando cada día un poco más, para que no le reviente la factura a nadie”, indicó.
Finalmente, negó que la medida signifique un aumento de tarifas. “No se debería hacer, no corresponde en absoluto”, concluyó.
Los gremios apoyaron la medida
El titular del sindicato de AySA, de gran cercanía a Hugo Moyano, José Luis Lingeri, dijo que la quita le “parece una buena medida, un avance”.
Asimismo, defendió que “no puede ser que los que más tienen paguen lo mismo que los de menores ingresos”. “En Recoleta pagan por servicio en un bimestre menos que una boleta de televisión por cable”, agregó.
Finalmente, declaró: “los subsidios fueron un instrumento muy buenos para el crecimiento y el desarrollo del país, pero está correcto que se los revea”.
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