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domingo, 20 de septiembre de 2015

Gimenez, "El Misionero" y Julian Busteros, que simula trabajar de juez.

A la tarde, el sol tiene la mala costumbre de bajar.
En la comisaría 4ta de Bosques, el sol baja mucho antes.
Gimenez es un muchacho cuarenton, paraguayo, humilde, trabajador, y que porta un optimismo absoluto.
Tiene una claridad meridiana es su visión de la vida y de las cosas.
El junto al Misionero y cientos mas, hicieron un asentamiento en el barrio Luján de Florencio Varela.
No tienen ningún servicio, y ellos mismos están tirando las líneas de electricidad, respetando las pautas técnicas de EDESUR, comprando los materiales, postes, etc.
A los vecinos se les filtró un transa.
El transa murió en forma misteriosa, y la policía perdió un cliente importante.
Primero lo mataron, y luego quemaron la casa.
Las armas, las drogas y el dinero desaparecieron.
Algunos policías se fueron de shoping esa semana.
Al Misionero, le volaron la puerta y le allanaron la casa.
Constantemente le preguntaban por el dinero, las armas y las drogas.
El Misionero, que de lo único que sabe es de trabajar, ve como su pequeño emprendimiento industrial, es destrozado con el allanamiento.
Lo detienen.
Gimenez, vecino a un par de cuadras, tuvo un poco mejor suerte.
Allanaron en su ausencia.
La casa dada vuelta patas para arriba.
Gimenez solo sabe de trabajar.
Gimenez sabe que es inocente de todo, y se dirige al juzgado a presentarse y ver que pasa.
Pasa que Busteros lo detiene.
Busteros es un narcokirchnerista explícito, un delincuente.
Entre ambos no se conocian, pero están imputados de matar al transa y robarlo.
Los policías se rien.
Busteros mira para otro lado.
Julián Busteros
En el patio de la comisaría 4ta de bosques, el sol apenas toca la pared una hora y los presos se alternan para recibir un poco de sol.
El Misionero es muy inteligente y está deprimido.
A nadie le importa un pito y los dos vecinos siguen presos.
Cuando preguntan que prueba hay contra ellos, se enteran que Busteros impulsó la causa porque alguien dijo que oyó a otro decir....."fué el misionero".....
¿No es una maravilla?
En la comisaría 4ta de Bosques, los muchachos comen en el piso con los dedos.
Busteros se sienta a la mesa familiar y resopla.
Busteros tuvo un día agitado.
Mira a su familia y sonrie.
El sol hace rato que se fué.
Gimenez escribe una carta a su esposa, y el Misionero, está angustiado por el parto inminente de su esposa.
¿A quien le importa esta historia?
Busteros sabe que a nadie, salvo a sus víctimas.
Pero ocurre que a mi si.
Y a los medios nacionales también.
Será cuestión de esperar.
Busteros tiene padrinos politiqueriles que están preocupados.
Esperemos hasta que vuelva a salir el sol.


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