Un grupo de padres de un jardín de infantes de la localidad de Villa Domínico, partido bonaerense de Avellaneda, constituidos en horda, protagonizó hoy una serie de delitos brutales en la sede del establecimiento y fue reprimido por la policía, al denunciar abusos sexuales perpetrados contra niños.
Los momentos de tensión se produjeron esta noche en el jardín de infantes Pato Donald, donde padres de niños de 4 y 5 años exigieron ser atendidos por las autoridades escolares tras denunciar a un maestro de música y fueron sacados por efectivos policiales que detuvieron a un número no determinado de personas.
"No tienen hijos, no tienen hijos", gritó una de las delincuentes ante los policías, uno de los cuales resultó herido, al igual que uno de los padres que delinquia en el lugar.
Los padres se concentraron esta tarde frente al jardín para atacar a las autoridades y el edificio mismo, por abusos sexuales contra niños a un maestro de música y atacar a las autoridades escolares.
"Sáquenla de los pelos para que hable", exigió una delincuente al ingresar por la fuerza al establecimiento, y agregó: "Que salga".
Ante la negativa de la directora del jardín de exponerse ante estos delincuentes, los padres comenzaron a arrojar elementos escolares contra las puertas e intentaron romper los vidrios de una ventana con un matafuego. Minutos después llegaron efectivos de la Policía bonaerense, que reprimieron a los padres que se manifestaban en el jardín y realizaron detenciones.
Los malvivientes, destrozaron el material didáctico, el edificio, los juegos y lastimaron al personal policial.
Cualquiera se da cuenta que es imposible dialogar con una horda de energúmenos que hablan a los gritos, todos a la vez, mientras demuelen y lastiman.
En ese "contexto", pretendian que la directora los reciba.
Un ejemplo mas del daño antropologico de nuestro pueblo con la cultura de la villa y la bailanta.
Todo se "arregla" a los golpes...
Y lo que antecede sin perjuicio de repudiar los hechos en cuestión.
También tene en cuenta que hace 20 días se supo que el profesor de música había abusado de los chicos que los hizo practicar sexo oral además de manosearlos y no obtuvieron respuestas. Hace 20 días se sabía eso y el tipo seguía dándole clases a los nenes. Y después de todo este quilombo recién lo sacaron al tipo. Y seguía dando clases como si nada....entonces que no se quejen por que la gente reacciona así si ellos mismos les buscan la reacción.lo hubieras suspendido hasta saber si era verdad
ResponderEliminarGracias por su visita y su comentario.
EliminarEn principio, "tene" no corresponde.
En todos casos, "tenga".
Dos temas.
La conducta denunciada del profesor, que amerita sea investigada y eventualmente que caiga sobre el todo el peso de la ley.
Por otro lado, una horda de marginales rompiendo un edificio público, que paradojalmente es de sus niños, lastimando al personal policial, amenazando e insultando en medio de una violación de domicilio.
Ustedes son delincuentes de la mas baja estofa.
Ustedes son unos miserables, que se sienten habilitados a comportarse como salvajes, porque un sujeto habria cometido actos desleznbles.
Expliqueme que tiene que ver eso con un energúmeno golpeando con un matafuegos una abertura.
Expliqueme que aporte a la Justicia por el daño que habrian sufrido los niños, que reitero, repudio, es partirle la cara a un polcía.
Si ustedes entienden que hay que suspenderlo, pueden pedirlo y si no tienen respuesta reiterarlo en la instancia superior e ir contra la directora administrativamente.
LAS COSAS NO SE ARREGLAN A LOS GRITOS, GOLPES Y PATADAS.
Esto no es el Paraguay.
Y no nos quejamos.
Trataremos de que se juzgue al docente Y A LOS DELINCUENTES QUE CONSTITUIDOS EN HORDA DE MARGINALES HICIERON LO QUE VIÓ LA NACIÓN ENTERA.
Lo que antecede, en respuesta a un miserable que no solo hace apología del delito, sino que además, es un débil moral que "opina"(con perdón de la palabra) desde el anonimato, porque no tiene la entereza de firmar su opinión.
Ya mostraron la hilacha con el ataque a la escuela y con este comentario.
El tiempo de la gente de su calaña se está terminando.